Por Iván Arrazola Cortés. Publicado en Etcétera.
Uno de los principales cambios que se generaron con la ley electoral de 2014 fue quitar poder a las fuerzas políticas para evitar que se repartieran por cuotas los puestos de consejeros electorales del INE.
Con esa reforma se introdujo la figura del Comité Técnico de Evaluación que se encarga de la preselección de quienes formarán el Consejo General del Instituto Nacional Electoral, este Comité se encarga de integrar las quintetas y entregar la información a la Cámara de Diputados, para que seleccionen a los que finalmente integrarán el Consejo General.
El Comité Técnico está integrado por siete personas, tres de ellas designadas por la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados; dos nombradas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y dos más por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Lo que se buscó con esta figura, fue en primer lugar, privilegiar un criterio meritocrático y objetivo en la selección de los perfiles que integran el Consejo General y en segundo lugar, que las personas que integran este Comité sean expertos en la materia, y que sobre todo se apeguen a los principios que rigen al INE: certeza, legalidad, independencia, imparcialidad y objetividad
El Comité en esta ocasión tendrá la responsabilidad de seleccionar las quintetas para sustituir al presidente del Consejo General que concluye su periodo y a tres consejeros.
Las condiciones en las que se hará la renovación de la presidencia del INE y de los tres consejeros no son las mejores, teniendo en cuenta que la administración del presidente López Obrador está empeñada en destruir a la institución que durante muchos años ha dado certeza a la organización de las elecciones, con la reducción de su presupuesto y el desmantelamiento del INE, el oficialismo pretende reconstruir el sistema con procesos electorales débiles.
El oficialismo ha aprovechado su posición mayoritaria en la Cámara de Diputados para seleccionar perfiles afines. La clase gobernante entiende que los mejores perfiles son los que defienden la causa de la 4T no necesariamente los más capacitados para atender estas funciones.
Así los perfiles que eligieron desde la Cámara de diputados estarán representados por miembros que tienen una relación directa o afinidad con el régimen, Enrique Galván Ochoa, columnista de La Jornada y uno de los redactores de la Cartilla Moral; Evangelina Hernández, coordinadora de administración y finanzas de la Guardia Nacional; Andrés García Reper, se desempeñó como representante de Morena en la elección de gobernador de Tamaulipas.
La forma en la que fue votada la integración del Comité habla de cómo el oficialismo intenta imponer su mayoría, al final Morena y sus aliados votaron a favor de la propuesta mientras que el bloque Va por México se abstuvo y MC votó en contra.
Por su parte el secretario de Gobernación instruyó al bloque oficialista en la Cámara de Diputados sobre cómo se deberá de votar la elección de los consejeros, “Ustedes son gente de convicción y saben que no vamos a suplicar la construcción de una artificial mayoría constitucional. Yo les pido que cuiden el proceso y que muchos de aquí incluso fueron por insaculación, pues así se puede y se debe elegir a los consejeros electorales” (Animal Político 30/01/23).
Queda claro que en este momento no hay el menor interés por parte del gobierno por tratar de consensar ni la integración del Comité Técnico de Evaluación ni los miembros que llegaran al Consejo General. Sobre este proceso quedará la sombra de miembros del Comité afines al régimen, pero también que los perfiles para integrar el Consejo General sean el producto de la imposición de una mayoría.
El mayor riesgo como ha sucedido con otros organismos, es que el INE pierda su autonomía al imponer perfiles a modo, como sucedió con la CNDH que perdió independencia y capacidad para alzar la voz ante la violación de derechos humanos y la crisis de separaciones y homicidios en México, la acción de la institución se ha visto limitada por su titular que es un miembro leal al presidente. En el caso del INE es sabido que el oficialismo ha orquestado una campaña señalando que es una institución onerosa, pero lo que en realidad pretende es debilitarla para generar procesos electorales a modo.
El trabajo que deberá desarrollar el Comité Técnico consta de distintas etapas: revisión de expedientes, aplicación de un examen a los aspirantes y la evaluación por parte del Comité. Es importante seguir paso a paso el trabajo que desarrolle el Comité y observar si en los hechos el trabajo que desarrollen genera consensos o prevalece la división entre el oficialismo buscando perfiles afines o un trabajo de calidad en el que se evalúe la trayectoria y el conocimiento en la materia de los aspirantes.
No debe de perderse de vista un aspecto, una parte central de política se encuentra en la negociación y el consenso, a pesar de lo perfectible que puede ser el sistema, el INE ha funcionado de manera eficiente, gracias a que se han colocado perfiles cualificados al frente del Consejo General, el oficialismo miente cuando señala que el INE ha sido promotor de fraudes, el INE ha dado certeza en materia política, si no hay un árbitro capaz de generar certeza se corre el riesgo de generar inestabilidad social además de la violencia que prevalece en el país.
Iván Arrazola es analista político y colaborador de Integridad Ciudadana. @ivarrcor