Por Javier Agustín Contreras. Publicado en ContraRéplica.

Mañana primero de marzo, por fin inicia la recta final de la carrera más larga por la presidencia de la República, lo cual solo significa que ahora sí son los tiempos legales para pedir de forma directa el voto y dejar a lado la simulación que hemos vivido desde el mes de junio del año pasado.

Estas elecciones tan anheladas por muchos; ya sea para que se dé el cambio o mejor dicho la alternancia en el poder que permita desarrollar acciones que fortalezcan la democracia y el desarrollo integral; o se refrende la transformación de la que se ha hablado durante los últimos 6 años como mínimo y que para un amplio sector social solo ha significado una gran decepción, ya que aunque se han realizado grandes obras y generados programas sociales para abatir la pobreza, no se ha logrado eliminar la corrupción y la inseguridad se ha potencializado.

Han sido 8 meses de una actividad política intensa, hemos visto de todo, desde la selección de candidatos para representar un movimiento hasta la selección de estos a través de mecanismos poco ortodoxos pero legitimados por todos y cada uno de los actores políticos y sus huestes; para muchos los eventos que observamos y vivimos fueron actos simulados y/o anticipados de campaña; que no pasó a mayores ya que, tanto el partido oficial con sus aliados, como los de la oposición, realizaron las mismas acciones, normalizando y fortaleciendo lo que muchos describen como los nuevos tiempos electorales; mismos que van a terminar con las elecciones de este 02 de junio. Esperemos que a partir del próximo viernes 01 de marzo, empecemos a escuchar propuestas, siendo uno de los temas de mayor relevancia, el combate a la inseguridad, lo cual se debe de retomar de forma inmediata por los acontecimientos recientes, que no solo afectan a una parte de la población sino hasta a los mismos candidatos, ya que ahora son ellos las víctimas; la asociación DATA CÍVICA reporta que durante el mes de enero del presente año, se registraron 36 eventos vinculados con la violencia criminal-electoral en el país; de los cuales 8 están directamente asociados a precandidatos conforme al Boletín VOTAR ENTRE BALAS, que especifica que cinco fueron certeramente asesinados de los cuales 2 pertenecían a MC, uno al PAN, uno a Morena y una Al frente y tres atentados y amenazas, dejando en claro que estos delitos no respetan colores ni partidos, como se constató en Maravatío Michoacán el pasado lunes 26 que en un lapso de 24 horas asesinaron a 2 precandidatos a la presidencia municipal de dos expresiones políticas distintas. Si no se realizan acciones para prevenir este tipo de crímenes existirán regiones del país en las cuales no se puedan realizar las jornadas electorales, afectando la vida democrática del país que tanto mencionan las dos candidatas.

Quedan virtualmente 90 días. La situación del país no va cambiar, los medios de comunicación se saturarán de mensajes políticos electorales con plagados de propuestas que como ciudadanos debemos de analizar y razonar, a través de tres preguntas básicas; el ¿Por qué? de la propuesta, el ¿Cómo se va a realizar? y el ¿Cuánto nos va costar?, ya que prometer no empobrece, lo que lo hace es el cumplir.

Javier Agustín Contreras Rosales. Colaborador de Integridad Ciudadana AC, Contador Público, Maestro en Administración Pública @JavierAgustinCo @Integridad_AC