Por: Javier Agustín Contreras. Publicado en El Novedades.

En un país donde la indiferencia ante lo que sucede es un acto común, los ciudadanos se vuelve cómplices silenciosos y complacientes de lo que sucede.

En México se vive un estado de indolencia criminal, hacia todo lo que sucede; nada cimbra al país ni lo impulsa a participar en la agenda política, son pocas las voces que se escuchan y que tienen un valor específico porque son el ejemplo de que la decisión y el trabajo con un objetivo si dan frutos, siendo un ejemplo de esto Xóchilt Gálvez, quien en últimas fechas se ha colado sorpresivamente entre los nombres de los precandidatos a la presidencia, dando un giro de 360 ° ya que se le veía como la candidata más fuerte para competir por la Jefatura de Gobierno de la CDMX el próximo año.

Pero ¿quién es Xóchilt Gálvez?, pues bien, ella es una empresaria hidalguense egresada de la UNAM, que inició su carrera política en el sexenio del expresidente Vicente Fox, como titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de Pueblos Indígenas, en los últimos años ha sido jefa delegacional de la Miguel Hidalgo y actualmente se desempeña como Senadora de la fracción parlamentaria del partido Acción Nacional.

Xóchilt Gálvez es parte esencial de la realidad nacional, ya que como muchas mujeres ha vivido en carne propia lo que lo que miles o millones de mujeres mexicanas siguen viviendo hoy en día, ya sea por pobreza, por venir de una comunidad indígena o por ambas, donde la violencia intrafamiliar y el alcoholismo fueron un detonante para saber que no quería ser, como lo expresó en la entrevista que publicó Milenio el pasado mes de marzo.

Mas lo que la hace diferente; es exactamente esa capacidad de introspección que le permitió saber que no quería ser y encontrar que sí quería ser, lo cual la impulsó a conquistar con base a la constancia y esfuerzo, sus logros empresariales y políticos, ya que lo más difícil es poder definir de forma clara hacia dónde se va y que se quiere, lo cual hoy en día es un requisito esencial para buscar una candidatura, principalmente porque al menos un 50% del electorado no tiene interés de participar, bajo el supuesto de que su voto y su participación no influyen, se requiere un nuevo estilo de comunicación, que se precisó, pero principalmente uno que despierte del letargo a los ciudadanos, dejando un lado el abandono en que se encuentra la participación cívica y que es base de la democracia.

Bien lo confirmo el presidente con la designación de María Luisa Alcalde Luján como la nueva Secretaria de Gobernación, y su tan definido aprecio e impulso a Claudia Sheinbaum, son nuevos tiempos y las mujeres serán las piezas claves para el desarrollo del país.

Xóchitl Gálvez es la antítesis de Claudia Sheinbaum, es una mujer con ideas claras que sabe la importancia del equilibrio en el poder, la distribución de los ingresos, así como la importancia de las empresas como base de la creación de empleos y el desarrollo económico de un país, no es científica, sino práctica derivado de su historia de vida, cuestión que la hace una precandidata interesante para la postulación como candidata de la Alianza Va por México ante la clara llegada de Sheinbaum como candidata oficial del partido oficial.

Ella está evaluando su participación, esperando los tiempos de ley, sin que esto se entienda que esta inactiva, ya que es sabedora de que tiene la capacidad administrativa, sensibilidad social y liderazgo.

Javier Agustín Contreras Rosales. Colaborador de Integridad Ciudadana AC, Contador Público, Maestro en Administración Pública @JavierAgustinCo @Integridad_AC