“La verdad de las mentiras”


Por: Vladimir Juárez @VJ1204 Publicado en ContraRéplica


Si anda usted con la ficción de los 71 años del PRI; entonces usted sabe que hemos pasado por periodos diferentes… No hay un PRI igual en los 71 años: [el engaño sigue ahí]”.

Ex presidente de México, Carlos Salinas de Gortari

Vargas Llosa solía asegurar que “los hombres no viven sólo de verdades; también les hacen falta las mentiras: las que inventan libremente, no las que les imponen; las que se presentan como lo que son, no las contrabandeadas con el ropaje de la historia”.

Y es que, así como todas las verdades en las novelas literarias se mezclan con ficciones, se puede asegurar que todas las realidades se refugian en las mentiras. Pues la ficción enriquece la existencia de los hombres, la completa, y, transitoriamente, “los compensa de esa trágica condición que es la nuestra: la de desear y soñar siempre más de lo que podemos realmente alcanzar”. Dicho de otra forma; “los seres humanos han encontrado en la mentira una curiosa expresión de verdad”.

En el campo de la novela literaria, el terreno es fértil para las ficciones, pero al mismo tiempo, hay que pisar con cuidado en él, pues en esta arena – donde se mezclan la verdad y la mentira en el mundo de la ficción – conviven las trampas y los espejismos.

Algo similar sucede en el mundo de la política, donde quienes se apropian del poder inician cuidadosa y calculadamente la construcción de ficciones. Que no son otra cosa más que “relatos” de los poderosos, y que no se escriben para contar la verdad, sino para transformarla, añadiéndole algo tan viejo como la misma tentación congénita de retener a toda costa el poder.

Las ficciones en política no son ingenuas o gratuitas: llenan la vida de esperanza o de incertidumbre, según el apetito que se ocupe. Por eso, los poderosos apelan a una fe que todo lo justifica y absorbe. Pero para ello, los “ilusionistas” deben organizar la memoria colectiva; colocar en la historia instrumentos de gobierno cargados para legitimar a quienes mandan y de proporcionar coartadas para sus historias. Ergo, se dedican a convertir la ficción en historia.

Hasta aquí, esto pudiese ser – tal vez – la historia de la mayoría de los pueblos y su tentación de ejercer el poder tiránicamente. El problema de fondo es cuando un Estado, “en su afán de controlarlo y decidirlo todo arrebata a los seres humanos el derecho de inventar y de creer las mentiras que a ellos les plazcan, se apropia de ese derecho y lo ejerce como un monopolio a través de sus historiadores y censores,” aboliendo con ello, la tragedia de las libertades, en especial la de la transparencia.

Bien vale la pena, teniendo como fondo la “verdad de las mentiras” de Vargas Llosa, así como la historia y el proceso democrático que hemos tenido y que vivimos hoy en nuestro país, el reflexionar una realidad hecha ficción o una ficción hecha realidad en nuestra historia política.

Esta ficción de la “Realpolitik” quedó registrada en video cuándo la periodista Denise Maerker entrevistaba al expresidente Salinas de Gortari en 2005, horas después de la toma de protesta del gobernador Peña Nieto. Cabe decir que, en aquella famosa entrevista, se acuñó la frase “política ficción”.

Pero más allá de lo anecdótico de esa frase, el video de la entrevista es revelador cuando – al ser severamente cuestionado por la periodista sobre la adversidad que mantenía Salinas de Gortari con el entonces candidato presidencial de 2006, AMLO – el ex presidente expresó:

“- Denise. Habrá que preguntarle al que aspira… “Habrá que preguntarle qué opinan sobre el Estado de Derecho, qué opinan de las instituciones construidas dentro del estado de derecho para limitar el poder presidencial, qué opinan de las resoluciones de la SCJN: ¿las van a acatar? Qué opinan de las resoluciones del Congreso: ¿las van a aceptar? Qué opinan de las resoluciones del IFE [INE], si no les favorecen: ¿las van a aceptar?, y ¿las decisiones de derechos humanos…? Y luego, [qué opinan de la crítica de] los medios de comunicación; de todo aquello que acota el poder presidencial, eso es lo que hay que preguntarle… ¿qué opinan de todo ello…? todo lo demás que se me imputa… son fabricaciones de temas para evadir a dónde quieren llevar el país… a eso Yo le llamo, política ficción”.

Han pasado ya casi 33 años de aquel episodio donde Mario Vargas Llosa, en 1990, puso a prueba la tolerante “democracia” del PRI, asegurando que el priísmo podría considerarse “una dictadura perfecta”. Más aún, han pasado ya casi 5 años de haber expresado algo más sobre México cuando dijo: “El PRI que ha asumido el poder, hay que reconocerlo, no es el mismo PRI de antaño”.

En este recuento de ficciones, “revoluciones institucionales”, alternancias y transformaciones, hay una ficción que cada día es más real y clara: el PRI no fue, no es, ni ha sido un partido político único, es una “ideología hegemónica” propia IFEque ha perdurado, guste o no, para venerar y ejercer el poder.

Vladimir Juárez. Colaborador de Integridad Ciudadana A.C. @Integridad_AC @VJ1204
Fuente: Vargas Llosa, “La verdad de las mentiras”, 1990.
Fuente: Punto de Partida, 2005. Entrevista de Denise Maerker al ex presidente Salinas de Gortari. https://www.youtube.com/watch?v=o3z4HEyqB_E