Por Iván Arrazola. Publicado en ContraRéplica.

La conversación refleja un momento desgarrador. Diana, la madre del bebé, exclama: «¿Qué hago? ¿Dónde lo dejo? Tenemos que deshacernos de esto. Amor, aún se mueve… Tengo tanto miedo. Dios mío, no puedo. Esto está muy mal. Tíralo en algún canal, no sé.»Mientras tanto, Lucio intenta calmarla, diciendo: «No lo veas más, amor. No le prestes atención. Cuando regrese a casa, me encargaré de todo. No lo volverás a ver.» El diálogo representa el momento previo en el que Diana y Lucio toman la decisión de deshacerse de su hijo recién nacido.

Unas horas después las cámaras captan el momento exacto en que el bebé fue abandonado por su padre, Lucio, un joven de 18 años, estudiante de gastronomía, quien ante las autoridades declaró: «La decisión de abandonar a mi hijo fue tomada en común acuerdo con mi pareja y su madre, Diana ‘N’, de 21 años. No teníamos los medios para mantenerlo y confiábamos en que alguien lo encontraría y le brindaría una mejor vida.»

Por su parte, Diana, la madre del bebé abandonado, de 21 años, trabaja en una pastelería y tiene otro hijo. En su declaración, aseguró: «Le entregué el bebé a su padre para que me ayudara a decidir qué hacer. Me dijo que se lo llevaría, y yo me quedé limpiando porque estaba en mi área de trabajo y no podía dejar todo así. Pensé que lo llevaría al hospital, nunca imaginé que lo abandonaría.»

Las críticas de vecinos y usuarios en redes sociales no se hicieron esperar, calificando a Lucio como un «monstruo» e «inhumano». Ante los medios, la madre de Lucio declaró: «Aquí solo hay una víctima y dos personas que actuaron mal.»

En un episodio que muchos pueden considerar irónico o una broma de mal gusto, la madre de Lucio afirmó que intentó presentarlo en dos sedes distintas de la Fiscalía del Estado de México para hablar con un ministerio público, pero en ninguna fueron atendidos. Como suele ocurrir en estos casos, la viralización de la noticia en redes sociales generó una reacción más rápida que la de las propias autoridades.

Actualmente, ambos jóvenes se encuentran en prisión acusados del delito de tentativa de homicidio. Si bien su acción fue grave, el caso pone en evidencia un problema aún mayor: las dificultades que enfrentan los jóvenes en situaciones de vulnerabilidad. En México, durante el año 2023, nacieron 100,000 niños de madres menores de edad, y el 37% de las mujeres que tuvieron hijos eran menores de 24 años (El País, 2025).

El linchamiento público impide analizar a fondo una realidad mucho más compleja: la falta de educación sexual tanto en el hogar como en las escuelas, la ausencia de programas de prevención efectivos, y la escasez de oportunidades para millones de jóvenes en el país, quienes no ven en la educación una vía real para mejorar sus condiciones de vida. Aunque existen programas sociales dirigidos a la juventud, estos resultan insuficientes para cambiar un contexto en el que las oportunidades se cierran constantemente, perpetuando así un ciclo de desigualdad y precariedad.

Sin acceso a educación de calidad, sin condiciones adecuadas para el desarrollo y sin alternativas viables de futuro, casos como este seguirán repitiéndose. Cuando en el debate público se señala la ausencia de valores como la causa de estos hechos, se omite una realidad fundamental: miles de jóvenes enfrentan un sistema que no les ofrece posibilidades reales para progresar. La falta de opciones no solo los empuja a la marginalidad, sino que también los coloca en situaciones extremas, donde la desesperación y la falta de apoyo derivan en decisiones irracionales y crueles.

La decisión que tomó la pareja aquel día, al abandonar a su hijo recién nacido en una bolsa de plástico en la calle, los marcará de por vida. Sin embargo, en lugar de generar una reflexión profunda sobre nuestra sociedad y sus fallas estructurales, su caso solo ha provocado la indignación pública y pronto quedará en el olvido, mientras se espera el próximo escándalo para viralizarlo en redes sociales.

Iván Arrazola es analista político e Integrante de Integridad Ciudadana A. C. @ivarrcor @integridad_AC